Punkies go home (¿A qué home van a ir los punkies, a cuál?)

El otro día hablando con la companheira Marga salieron a flote unos comentarios en cuestiones de moda. Dije que escribiría un post sobre ello y allá voy.

Porque sí amigos, estoy muy triste, muy apenado, casi casi deprimido. La moda que nos ha dominado es una mierda de mucho cuidado.

Por regla general los periodos de moda se suelen alternar con uno bueno y uno malo. En los 60, antes de que al final triunfara el movimiento confirmado en el verano del amor la cosa no era muy allá, el rollo mod nacido allá en Londres (Dónde si no va a nacer un movimiento, ¿en Curtis?) en las mujeres aún era aceptable, pero en los hombres... (veanse fotos de Bowie de la época).
Después de lo mod estuvieron lo hippies, esa sí que fue una moda en el vestir, igual degeneró un poco y acabó siendo pelín excesiva, pero los hippies tenían gusto por el color y la combinación con tejidos y formas contribuían a la belleza.

A finales de los 70 el movimiento en auge fue le movimiento punk, qu elo hizo todo más austero, más negro, menos color, no es que fuera un movimiento lamentable, pero se perdió bastante el gusto que había anteriormente.

Llegaron los 80... con esto se dice todo. Joder, que mala década los 80. La década hortera pro excelencia, cómo el mundo entero pudo confundir LO PUTO PEOR con lo sofisticado. Los pelos cardados, las combinaciones de colores ácidos y agresivos que quemaban las retinas, el corte de la ropa, los bikinis con braga que los lateras llegaban hasta las axilas (sobacos de toda la vida)...Los 80, tenía que haber acabado el mundo antes de que aquello llegase.

Los 90 bien, gracias. Finales de los 90 fue buena época, daba gusto ver a las mujeres por la calle, eran aquellos tiempo en los que los pantalones se ajustaban a las caderas y al culo y después bajaban por la piernas tomando distancia respecto a la piel y creando un volumen, sin ser lo acampanado de los 70, que armonizaba con el calzado... hayyyy.

Hoy, hoy la cosa está jodida. Así como sin quererlo, el aire pijo (que mezclado con lo hippies es lo puto mejor. Os imagianis a dos mujeres de pelo largo y liso vestidas a sí y después se van des....) se ha mezclado conuna especie de estilo Indie y la cosa ha acabado muy mal. Todo empezó con las bailarinas, yo no discuto su comodidad, Dios me libre, pero empezaron a popularizarse y hoy todas las mujeres las llevan, ¿cuál es el fallo de las bailarinas? Pues que son demasiado planas, al no tener ninguna altura en el talón hacen que el culo se vea más bajo, que las piernas se perciban como más cortas y que la figura en general sea menos bonita. Hoy en día las bailarinas han evolucionado, para peor claro, ahora tienen puntas alargadas, pero no por ello tapan más pie, que va, ahora tienen puntas estilo elfo o duende protituto, pero se ve el nacimiento de los dedos, joder que eso no es bonito.

Bueno después de las bailarinas llegaron los putos pantalones piratas-pitillo. ¿Somos punkies o yonkis? No, pues entonces por qué ponerse pantalones de yonki. A qué viene eso de ponerse pantalones que van todo el rato pegados a las pierna, pero qué es eso. ¿Qué concepción de la belleza es esa? Hoy casi todas las mujeres visten pantalones pitillo (es lo que hay en las tiendas) y de tiro muy bajo, el pantalón pitillo lo único que hace es incrementar cualquier defecto de los culos y empeorar la composición general de la figura y la combinación de los bloques superior e inferior.

En serio, esta época pasará y, como pasó con los 80, nos daremos cuenta de que no fue el movimiento más acertado (recordemos que los pitillo son marca dela casa de los punkies, de los punkies oiga usted, joder, de los punkies)

PD: Hago una nota para ese movimiento adolestente de hace un par de años en los que las tías iban con pantalones de tiro muy bajo, muy muy acampanado en el fondo y con aquellas botas, bueno, botones, a lo que les metían calcetines o yo qué sé debajo de la lengüeta, hasta parecer que llevaban piernas de un transformer con entrada para liberty. Por cierto, creo que esta moda también ha sucumbido bajo la moda pitillo, y algo que se intala tan rápido como las xestas (retamas parece ser) después de un incendio definitivamente no es bueno.